Este poema de Neruda, tan triste, tan profundo, tan hermoso, (y tan bien recitado en el video de You Tube que has publicado) me ha hecho sentir (con toda su fuerza) la trágica belleza de la vida. ¿Cuántos corazones rotos hay en este mundo? Incontables. ¿Cuántas historias de amor llegan, todos los días, a su final definitivo? Muchísimas. Podríamos decir, esta misma tarde, esta misma noche, mirando la Luna, mirando las estrellas: ¡Benditos aquellos que aman para siempre! Pero, como sabemos, aún a los amores más largos, más duraderos, más dichosos, les está esperando, allá adelante, en el doloroso abismo del tiempo, el último beso, el último abrazo, el último adiós, la última puerta de la vida.
Dejemos ver los ojos de la noche a los que pasan sin poder ver el misterio. Descubramos a Isis, serena en su poder.
Dejemos ver las manos de la noche a los que vagan al azar. Entumecida está la Esfinge, y ya basta de descansar. Dejemos ver el alma de la noche a los que ocultan su dolor, Y dejémonos ver nosotros mismos en todo instante el corazón.
"La pluma es la lengua del alma." "La música compone los ánimos descompuestos y alivia los trabajos que nacen del espíritu." "¡Venturoso aquel a quien el cielo dio un pedazo de pan, sin que le quede obligación de agradecérselo a otro que al mismo cielo!" Miguel de Cervantes Saavedra
Amo la lingua italiana
"Lo maggior don che Dio per sua larghezza fesse creando, e a la sua bontate più conformato, e quel ch'e' più apprezza, fu de la volontà la libertate; di che le creature intelligenti,e tutte e sole, fuore e son dotate." Dante Alighieri
La poesía y la música han sido siempre parte de mi existencia. En el ocaso de mi vida, ellas son lo único que me sustentan y dan vida. Sin ellas moriría. Sarita
1 comentario:
Sarita:
Este poema de Neruda, tan triste, tan profundo, tan hermoso, (y tan bien recitado en el video de You Tube que has publicado) me ha hecho sentir (con toda su fuerza) la trágica belleza de la vida. ¿Cuántos corazones rotos hay en este mundo? Incontables. ¿Cuántas historias de amor llegan, todos los días, a su final definitivo? Muchísimas. Podríamos decir, esta misma tarde, esta misma noche, mirando la Luna, mirando las estrellas: ¡Benditos aquellos que aman para siempre! Pero, como sabemos, aún a los amores más largos, más duraderos, más dichosos, les está esperando, allá adelante, en el doloroso abismo del tiempo, el último beso, el último abrazo, el último adiós, la última puerta de la vida.
¡Que sigas bien!
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